NUESTRA ECONOMÍA EXIGE CAMBIOS
Innovación, tecnología,
emprendimiento y bienestar social para todos, constituyen los pilares para
consolidar nuestra formación social. Nuestra economía exige cambios de acuerdo
a una nueva visión y perspectiva de crecimiento y desarrollo, obviamente como
consecuencia de los agentes económicos que reciben permanentemente el estímulo
del mercado, de los nuevos niveles educativos y de la generación de nuevos
proyectos productivos y de servicios que permitirían consolidar la producción
nacional y aumentar los niveles de empleo.
Desde marzo hemos
asumido las medidas que se adoptaron para contener esta pandemia: el
aislamiento social con la cuarentena y la contracción de muchas actividades no
esenciales para la economía. Evidentemente, para mantener la cadena de pagos y algunos
compromisos financieros, a pesar de la pérdida de empleo de muchas familias y
una severa contracción de los ingresos de muchos agentes económicos. Así, el
proceso de acumulación de capital de la economía peruana ha sufrido una
disminución para el primer semestre de este año, con una caída equivalente a -17.4 por ciento para el PBI (Producto Bruto Interno).
Se estima para este segundo
semestre una caída del Producto Bruto Interno peruano de -8.4 por ciento. Con todo esto, se proyecta
una contracción de la producción nacional para este año 2020 con una tasa
de -12.7 por ciento.
Los agentes
económicos, las diferentes familias y la empresa nos conectamos con una
problemática económica, social y ambiental en un mundo globalizado. Hay
expectativa de vida, empuje, coraje y dinamismo en nuestro entorno poblacional y
las comunidades. Se espera consolidar nuestra formación social en un nuevo
orden mundial, con un mejor manejo macroeconómico, mayor innovación y bienestar
social.
La Concepción de los Cambios
Se considera la
educación como en factor importante para cambiar el mundo, entendiendo esto
como una forma de buscar el bienestar social para todos. Quizá hace varias
décadas se comprendía esto de cambiar el mundo como si quisiéramos hacer todo
un movimiento social. Ahora, todo cambia, con una nueva visión es fundamental
buscar el bienestar general y que no sea únicamente para un grupo o algunos
grupos determinados. Como sabemos, en el Perú, aquí donde vivimos, mucha gente
y muchas comunidades necesitan a veces de motivación y emprender algo nuevo para
ir creciendo económicamente, de manera espiritual y socialmente.
El entorno de nuestra
formación social y la economía nos acerca a una situación donde muchas veces
hemos escuchado por ejemplo de algunos funcionarios de algún ministerio o de
una empresa determinada que a veces dicen: “somos técnicos”, “somos
profesionales técnicos”. Eso escuchábamos. Ahora, por favor, eso se entendía
muy bien hace varias décadas, donde nos dividía esa conceptualización, la
cuestión técnica digamos como un punto aparte y la cuestión social un poco más
allá. Ahora, todo se une, quienes dicen que son técnicos tienen que ver específicamente
con el aspecto social porque todo va unido e involucrado, no es posible hacer
una separación en ese sentido.
Nuestro modelo de
acumulación de capital debe propiciar en la actual coyuntura la expansión de la
demanda, principalmente de los sectores medios que contribuyen para dinamizar,
consolidar y potencializar el mercado doméstico e interno. Se han dado críticas evidentemente a la forma
de distribución de créditos para reactivar la economía en los últimos meses,
donde muchos microempresarios no han tenido acceso a esa oportunidad. Todavía
así, hay la motivación por emprender nuevos proyectos en amplios sectores
poblacionales y saber que sí podemos hacer.
El mercado se abre y
hay direccionamiento para mayor emprendimiento. Decimos hay que ser creativos.
Cuando uno emprende una microempresa, un negocio, contribuye a alcanzar los
objetivos el saber que muchos empezaron desde muy pequeños. A veces la
adversidad enseña. La creatividad y perseverancia se forja con el tiempo.
Para emprender una
actividad y dirigir un negocio cada uno tiene una semilla, hay que explotar esa
característica. No solamente hay que percibir el entorno y contexto social. Uno
tiene que ir al campo. Ensuciarse los zapatos. Hay que hacer las cosas que a
uno le gusta, asumir riesgos. Tener iniciativa y creatividad. Ser el mejor. Autoestima,
empatía, ideas innovadoras, son las condiciones para cualquier persona o fuerza
de ventas u organización.
Estamos unido a
tecnología. Hay avance tecnológico increíble. A veces no podemos imaginar todos
los avances que hay definitivamente en todo esto. Observamos mucho en internet.
Amanecemos muy temprano viendo tecnología, estamos conectados de alguna manera.
A veces también hacen alguna crítica, en el sentido que no hay comunicación
entre las personas, todos están ocupados con las redes sociales y se ven en
muchas imágenes por la web.
Finalmente, para
terminar este argumento, somos importantes, se crea al hombre y la mujer porque somos el fin de todo lo bueno, nos
encomiendan una tarea muy importante: cuidar y cultivar todo lo creado. Hay que
cuidar todo lo que está en la naturaleza, cuidar el medio ambiente, la vida
animal. Tenemos una función muy importante y nos toca ser mejores ciudadanos,
mejores hombres, mejores mujeres. Tomar la mejor determinación. Tener el
propósito de ayudar a otros sin causar ningún daño.
No podemos dejar de
mencionar que hay crisis, hay un mundo de crisis económico social. Hasta en
esta misma pandemia, desde el mes de marzo hemos observado como diferentes
personas querían sacarle provecho a esta cuarentena, a veces personas del mismo
gobierno y algunas autoridades y cada uno quería beneficiarse. Hay un problema
de crisis.