Un presidente de papel
NUESTRO PERú LLENO
DE CORRUPCIóN
Inevitablemente todo sale a la
luz. Los niveles de corrupción de los últimos gobiernos en el Perú nos han
mostrado que el país está lleno de gente indeseable. En todas las instancias. No
hace falta nombrarlos ahora. Se siente vergüenza de esa gente y nos queda un
sabor de desconcierto, fastidio y molestia. Las mentiras por doquier, las
apariencias y tratar de negar lo imposible mientras se roba al pueblo peruano.
Ser lobista para sus propios intereses y siempre decir: “no hemos hecho nada”
“no cobramos suma de dinero”, así.
Gobiernos y el gobierno de ahora corrupto. Ni la pandemia les preocupa
realmente, más valen los cargos públicos y seguir recibiendo gollerías y más
dinero. Al final pueden soltar la risa y carcajada aparentando interés mientras
a la gente del pueblo hay que mantenerlos con unos cuantos soles. Todo lleno de
corruptos, inmersos en nuestro proceso de acumulación de capital, unido a las
relaciones de producción y a toda capacidad productiva. EL régimen sociopolítico,
las políticas de estado comprometidas y salpicadas por la corrupción. La famosa
expresión del estado de derecho es una farsa. Todo está direccionado,
manipulado y torcido. Todos los grupos sociales involucrados, desde empresarios
con moral aparente hasta los funcionarios de las instancias gubernamentales.
Lamentable.