Para el martes 14 de
noviembre, por medio de mensajes en Twitter y después en un mensaje
televisivo el presidente Pedro Kuczynski decía:
“Yo nunca he recibido aporte alguno de Odebrecht. Tampoco he
tenido vínculo profesional con Odebrecht...
Estoy absolutamente seguro de mis actos”
Días antes, el
empresario brasileño Marcelo Odebrecht, declaraba que habían contratado a Pedro
Kuczynski como consultor en 2006, después de finalizar el gobierno del prófugo
Alejandro Toledo. Que luego también lo contrataron para al menos una
conferencia. Luego de esas declaraciones se comentaba mucho en el ambiente
político y 5 días después apareció el mensaje de Kuczynski. (Quizá no
esperábamos que diga algo)
Para el sábado 9 de diciembre
pasado, Pedro Kuczynski en su presentación
en RPP, medio de comunicación radial y televisivo peruano, reconoció haber sido asesor
financiero de varias empresas, entre ellas mencionó a H2Olmos S.A., la
cual estuvo a cargo de la constructora Odebrecht. Así decía
también:
"Me han contratado
para H2Olmos, un gran anhelo de los lambayecanos; para la empresa de Kallpa en Chilca”
Definitivamente sus
declaraciones inicialmente negando todo vínculo con Odebrecht y días después
aceptando haber sido contratado, crea un ambiente de falta de ética política.
El común de la gente y los medios políticos advierten que nos están engañando.
Que hay mentiras de por medio y no se expresan con la verdad. Es probable que
hay mucho más por descubrir. Esas formas de proceder naturalmente desprestigia
al mismo presidente, siendo ahora un personaje no creíble y no confiable. Estamos
frente a una “caja de pandora”. ¿Qué sorpresas más tendremos?
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